Estaba lloviendo cuando mi tío vino a recogerme a la estación de autobuses.Al bajar del autocar, cerré los ojos y dejé que el viento suave del cierzo acariciara mi pelo y refrescara mis mejillas enrojecidas por el llanto. Un olor a madera y a tierra mojada me dio la bienvenida. A pesar de la fina lluvia y del tiempo, demasiado helado para principios de octubre, la fría acogida de aquel lugar me pareció incluso mas cálida que la de mi tío.-Tienes una pinta horrible, Clara.
Haber si me lo compro pronto :)
ResponderEliminarBesos y ya nos contaras.
¡Qué buena pinta! :D
ResponderEliminarDe tanto que lo he visto ya sueño con tenerlo.
ResponderEliminarUn beso:*
Me llama la atencion mucho este libro. Asi que me lo apunto a mi gran lista:)
ResponderEliminarSaludos,
Rosa
Estoy deseando leerlo *__*
ResponderEliminarBesos!